miércoles, 25 de febrero de 2009

Tratado sobre el amor para personas muertas en ciudades desoladas. (Libro primero, Parte 1 )

Es solo qué sientas los murmullos para que comprendas qué estás muerto, que tu cama no es tan blanda y qué algunas mariposas son amarillas.

Escribo al costado de un árbol de mango en un parque con palomas y personas indiferentes, no suelo escribir así, me gusta más, la luz de mi pc pero, este es un caso especial, hablo intentando buscar el aliento vitalista que produce el amor y el andar de la brisa, ese aliento del qué hablan algunos poetas. No lo encuentro, creo que se ha escapado a otro lugar o muy seguramente, se cansó de ser invocado.

En tu mente discurren tantas cosas, las buenas, las malas, las limosnas, el sexo y el ajedrez, está el blog en qué publicas, los semáforos, los pianos, la cara aquella qué no quieres qué se te olvide, la voz tosca y la demasiado agradable. Está es signo de interrogación grande y majestuoso siempre presente. Sientes cosquillas en los pies, Quizás no sea tan bueno hablar tanto, no sería bueno tampoco escribirlo. Notas qué hay quienes “Aman” a todos, unos a hombres por igual, otros a mujeres, algunos a los dos anteriores. Un mundo que se pone descolorido con tanto enamorado. Miles de estrellas son regaladas en noches tachonadas de imaginación, quienes reciben estrellas, se iluminan y encuentran ya otra posesión para ellos.

Vendedores de flores y chocolates se alistaron en el afán mendigo de un día en qué todos buscaban razones para dejar de lado la soledad. ¿Por qué así? Buscan el amor, el tema qué ahora traemos. La música, la poesía, y hasta la muerte se mezcla con el amor, como el amor de Julieta, werther o el de Alejandra, como el tuyo ¿?.

Why can't we give love that one more chance?
(…)Give love give love give love give love give love?
Cause love's such an old fashioned word
And love dares you to care
For people on the edge of the night
And love dares you to change our way
Of caring about ourselves

Mira tus manos, están intactas aún? Eres aún de hueso? ¿Puedes dar oportunidades? Es solo qué sientas los murmullos para que comprendas… ¿puedes pararte al filo de la oscuridad? Tus miradas se van desvaneciendo en el viento, cada una a su momento, puedes gritar y rezar, puedes ser cilíndrico o triangular. No te veo como solía hacerlo, leo las palabras salidas de tu nariz. El frenesí del parpadeo, la inconstante saliva en la boca, ¿puedes sentirla ahora?

¿Cómo se siente cerrar los ojos y mirar atrás en el tiempo? Todo se trata de lo mismo y de nada. Teléfonos y luces, sexo y ratones, miradas y cominos, música y zapatos, Cuenta… 1, 2, 3, paras de contar, sigues siendo tú, te puedes convertir en mí o en él o en conejos. Puedes ser un cuento mal contado o decisiones rotas, AMOR, la palabra se te va entre suspiros, no la comprendes, no puedes, estás al principio en este juego. Hasta la caligrafía de ella misma se te hace tosca. Para, abre los ojos.
...
Compartiré este blog con mel, tu.incondicional, así qué de vez en cuando la verán posteando por acá. Bienvenida Mel.

miércoles, 4 de febrero de 2009

Carta a una amiga desconocida

Querida amiga,
He sentido inmensos deseos de escribirte desde ayer, creo que es por estar haciendo nada y observando demasiado. Los días en Valledupar son calurosos, en ocasiones desesperantes, las tardes son más agradables pero las personas son mas quietas. Esta región es costa y totalmente ecuatorial, los colores son festivos, la brisa te golpea y despeina. Parece un buen lugar para vivir, pero las personas intentan andar sin darse cuenta de nada, disimulan sus miedos y frustraciones, algo como: “Quédate callado, ya todo acabará”. ¿Serán todos iguales? ¿A qué tienen miedo?


Es siempre lo mismo, lo he notado, te lo puedo asegurar. Desde el hombre que limpia vidrios, hasta el que se ve muy ocupado con portafolio y blackBerry en mano. Esto no es Praga, no es Orán y no tienes ante ti un Camus que te hable de ella, así que dejo este tema de lado, al menos de momento.

Aún sigo en vacaciones, tengo suficiente tiempo para ir por las tardes a la biblioteca de la 9 y 16, paso allí un par de horas caminando entre estanterías, descubriendo libros y autores que al instante me parecen fabulosos pero que luego abandono a su suerte o a un buen lector (mi tarjeta se ha vencido y no he pagado el costo por mantenerla activa este año). También, como ayer, suelo ir por secciones menos exóticas y tomo libros de ingeniería o psiquiatría. Salgo de allí, camino unas cuantas cuadras y me siento en el mismo café de siempre. Una mujer morena, de ojos castaños pregunta mecánicamente qué quiero, en pocos minutos ahí está mi café. Es el de siempre, sencillo con una de azúcar.


Cae la noche y me dispongo regresar. No sé de que extraña mezcla está hecho mi corazón querida amiga, suelo arrancarlo, entregarlo, y este en minutos está listo para la misma operación. Por ejemplo, me enamoré de la mujer que lucía sus cabellos negros, largos y sueltos sobre el Mercedes-Benz plateado que frenó en el semáforo cuando yo cruzaba la calle, aunque luego, la mujer de la venta de bisuterías me cautivó profundamente. Llego a casa, me tiro en el sofá, dejo que suene la música, quizás algo fito, U2 o Led zeppelín y sin darme cuenta me quedo dormido.

Espero, tu suerte y la mía se crucen por allí. Pueda mirarte de frente y tú hagas lo mismo. No tengo mas para decir hoy o si tengo pero no deseo hacerte el cuento muy largo. Ten un buen día.

Siempre tuyo,
Yo.

domingo, 1 de febrero de 2009

A la busca de Liliput - Parte I (Partida)

Las fuerzas están renovadas en ti, miras al piso, también puede ser el cielo, eres casi perfecto, al menos eso te dice tu ego, ego hermoso y miserable. Este es tu día. Tienes dos opciones: partes de inmediato a Liliput a encontrarte con gente inferior, para sentirte superior o te puedes quedar amargándote para siempre, quizá al final te des en la cabeza y sientas la tibieza en tus manos, y la vida se te escape para irse de ti, tipo fastidioso e incomprensible.

Eres al que acabas de mirar, eres el que se sentó en la buseta con olor desagradable, eres la anciana gorda "moronga", eres ese al que se le acabaron los sueños, eres la nena que está del otro lado de la pantalla, sonríe y pone cara de hermosa preocupada, eres parecido a Hitler y Mozart, eres "el hombre que ríe", eres hombre, polvo, y viento, sombra y muchas mas sombras ¿ya decidiste a donde diablos te vas?.

Corre trotamundos, ve destruyendo dragones, toma aire, olvídate de mp3 y de dell, tienes las esperanzas reprimidas de mil enamorados, recuerdas tu buzón de entrada de correos, olvídalos, ¿no recuerdas que son basura?, Seguro no sabes donde estás, cruza la esquina, cierra los ojos, tienes el poder. Camina, sigue, sabes que puedes estar en Katmandú, párate el plaza de Dubar y rie, primero llora, ríete de ti, de tus estupideces y de todos.


No hay milagros salvadores, eres quien eres y quien lee estas palabras pálidas (si es que tienen la suerte o el infortunio, quién sabe). No sirven las cosas esas, has pensado que la vida es la baratija que se vende por ahí a cualquiera. Lo sabes bien, sigue caminando. La poesía, la muerte y el amor son la misma cosa, aléjate de ellas.

Ya te lo he dicho, tienes que decidir a donde ir. Sabes que ir a Liliput es lo mejor, ponte en marcha.

Lector si has llegado a este punto. Gracias.
(esto será interesante)